FECHA 2 (15/08/10)
ARGENTINO DE ROSARIO 4-2 ITUZAINGO
CANCHA: Argentino de Rosario
ARBITRO: Martín Bustos (Mal)
GOLES: PT 8’ Mazzia (A) y 29’ Ulloa (A) ST 19’ Mazzia (A), 32’ N. Alonso (I), 44’ L. Buono (p) (I) y 48’ Pons (A)
INCIDENCIAS: ST 7’ Expulsado Germán Lemos..
EQUIPO: Christian García, Javier Páez, Hernán Luzzi, Ariel Fernández y Carlos Loto, Germán Lemos, Oscar Ibáñez, Marcos Zampini y Diego Gómez. Gustavo Silva y Lucas Buono. CAMBIOS: PT 35’ Sebastián Benítez por Javier Páez. ST 5’ Ezequiel Alonso por Diego Gómez y 15’ Nicolás Alonso por Marcos Zampini.DT: Guillermo Szeszurak.
TODO O NADA… NADAEl tren de la ilusión tenía una parada complicada en Rosario. El “Verde” del “Búfalo” se enfrentaba con, probablemente, uno de los equipos que van a pelear por el objetivo que tantos anhelan: el ascenso. Cancha difícil. Un reducto en el que Ituzaingó no se va victorioso desde el año 94’. Y en frente un equipo duro, con el regreso de muchos de sus jugadores más importantes.
Los mismos once que la semana pasada encendieron la llama de la ilusión en el pueblo Verde luego de ganarle a Barracas, fueron los elegidos por Szeszurak para enfrentar a Argentino de Rosario.Tarde fría en la ciudad del “Negro” Olmedo. Demasiado fría como para recibir un baldazo de agua tan temprano. Porque a los 8’ Ituzaingó ya estaba perdiendo. Salió con todo el “Salaíto” y Mazzia empujó un centro atrás de Pons para darle la ventaja al local.
Un minuto después, Verón envió una pelota al lado del palo del “Mono” García para ratificar que en los primeros diez del primer tiempo Argentino de Rosario ya era mucho más que el “Verde”. El mediocampo poblado del local marcaba el termómetro del partido y el dominio del juego era claramente para los dirigidos por Fabián Belén.La respuesta del “Verde” llegó mediante los pies de Lucas Buono que ensayó una media vuelta que el arquero Andrada mandó muy bien al corner. Luego el “Piojo” Páez cabeceó solo y nuevamente se encontró con la figura del arquero.
El “León” parecía despertar, pero a los 29’ otra vez golpeó el “Salaíto”. Un centro pasado encontró exageradamente solo a Roque Alfaro, que la bajó de pecho y la cruzó para que Ulloa entre y la meta. Ventaja amplia para Argentino y desorden generalizado en Ituzaingó. Los dos equipos jugaban muy parecido, pero el local estaba dos goles por encima. Ambos jugaban a una cosa de la mitad para arriba y a otra muy diferente de la mitad para abajo.
Pero los errores se notaban mucho más en los hombres del “Búfalo” que fallaron mucho, sobre todo en las pelotas paradas. A los 35’ el DT del “León” empezó a meter mano y a jugar al todo o nada. Adentro Sebastián Benítez por Javier Páez y el equipo quedaba con el mismo dibujo que había arrancado su rival: 3-3-1-3.
El “Verde” iba empujado por las ganas contagiosas de Lucas Buono, pero en un par de ocasiones nuevamente se topó con el arquero Andrada, una de las figuras del partido. Para el complemento a Ituzaingó no le quedaba otra que salir a descontar rápido para luego buscar el empate. A los 5’ ingresó Ezequiel Alonso por Diego Gómez, la intención era darle un poco más de equilibrio al medio campo. Pero esa buena intención de parte del banco del “Verde” se esfumó dos minutos después, porque a los 7’ Germán Lemos se hizo echar ingenuamente y el partido se fue al tacho. A partir de esa situación todo fue una bola de nervios y confusión.
Ituzaingó se estaba cavando la tumba solito, dos goles abajo y con un hombre menos. A los 15’ entró Nicolás Alonso para intentar algo aunque sea. El “Pájaro” Silva se acomodó en el andarivel derecho y arriba quedaron Buono y Alonso para llenar de centros el área de Argentino. Pero a los 19’ otro golpe certero del equipo local hacía prever la catástrofe. Porque lo de Verón no fue un rechazo, fue un pase largo exquisito para Mazzia que encaró solo para el arco del “Mono” García ante la pasividad de Loto y con un remate cruzado ponía el 3-0 lapidario.
El “Verde” seguía jugando al todo o nada. Iba ciego a buscar el gol, pero atrás quedaba regalado y sufría. A los 32’ de prepo, guapeando nomás, Nicolás Alonso descontó luego de que el optimista Lucas Buono la bajara dentro del área. Un poco de aire y a buscar el milagro. A cinco para el final se lo sacaron al “Pájaro” Silva en la línea y casi en tiempo cumplido penal para el “Verde” luego de un agarrón a Ariel Fernández dentro del área. Buono se encargó de fusilar a Andrada y el milagro parecía al alcance de las manos luego de que Bustos adicionara cuatro minutos más. Todos al ataque. Todos a cabecear.
El público local mudo porque el “Mono” García también iba a buscar la hazaña y los hinchas que se mandaron para Rosario colgados del alambrado gritando que se podía, que se lo empatábamos. Pero no. El último centro fue rechazado bien lejos y Pons quedó solo para empujarla al arco vacío.
Durante todo el partido Ituzaingó corrió de atrás. Siempre en desventaja. Primero en desventaja en la mitad de la cancha, que fue la diferencia que hizo Argentino en el primer tiempo. Después en desventaja en el resultado, durante 80 minutos. Luego la desventaja numérica con la expulsión de Lemos. Así el partido se hizo demasiado cuesta arriba y a pesar de que el “Búfalo” quiso ir por todo, hoy nos quedamos sin nada.
Equivocada o acertadamente el DT de Ituzaingó se apresuró en las decisiones y el equipo local aprovechó todo eficazmente. No se puede reprochar que el equipo no fue para adelante, pero queda en deuda en cuanto al orden táctico y defensivo. Seguramente habrán muchas cosas para trabajar en la semana. Para no volver a cometer los mismos errores frente a equipos que no te perdonan, y para no volver a jugar al todo o nada y quedarnos con las manos vacías.
EL LEON Y SU GENTE
¿Volvió el público visitante? Segunda presentación del “León” y segunda convocatoria espectacular. Aproximadamente 100 personas viajaron hasta Rosario para alentar a Ituzaingó. En el final del partido, cuando parecía que el milagro de empatar era posible se escuchó el aliento de la hinchada “Verde”, que mandaba al equipo para adelante.
Por suerte no hubo incidentes, a pesar del aliento del centenar de hinchas que se hicieron escuchar sin importarles que no puede haber público visitante en los estadios del ascenso. Seguramente el regreso habrá sido con mucha amargura y decepción, pero la gente del “León” una vez más dijo presente, a 300 kilómetros de Acosta y Pacheco.
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